El lugar del envejecimiento urbano

Una aproximación multiescalar al espacio de actividad de las personas mayores en Santiago de Chile

El proyecto examina el espacio de actividad de las personas mayores en las diferentes escalas de Santiago de Chile, según la accesibilidad a ciertas oportunidades urbanas. 

El equipo de investigadores de la Pontificia Universidad Católica de Chile analizó Santiago y sus barrios, hipotetizando que el espacio de actividad de las personas mayores no se limita necesariamente al entorno inmediato del lugar en el que viven, y que zonas más accesibles y entornos más amigables hacen que las personas mayores se muevan más y participen más en actividades fuera de sus casas.

Un mejor entendimiento de cómo las personas mayores configuran su espacio de actividad puede generar políticas públicas para adaptar las ciudades chilenas a una población cada vez más mayor en edad.

16,7% de la población chilena tiene más de 60 años y la mayoría vive en áreas urbanas.
INE, 2018.

La población está envejeciendo: Para el año 2050 uno de tres chilenos tendrá más de 60 años.
ONU, 2017.

Más de 1/3 de personas mayores continúan trabajando después de los 60 años, y su ingreso disminuye un tercio.
Centro UC Políticas Públicas, 2017.

La posibilidad de envejecer con autonomía y bienestar es diferente dependiendo del lugar, género y situación socioeconómica de las personas mayores en Chile.

La investigación tiene la intención de generar impacto desde el punto de vista científico, práctico y social

En Chile y América Latina la población está envejeciendo rápidamente, sin embargo, los impactos de una población que cambia de esta tendencia en las ciudades y su movilidad no han sido suficientemente estudiados. 

La investigación se aborda desde una aproximación multiescalar y avances metodológicos para incluir las distintas dimensiones que influyen en la accesibilidad y movilidad de personas mayores, comprendiendo que la movilidad se ve incidida por factores como la edad, el género, el ingreso y las condiciones de salud.  

El proyecto propone entregar herramientas de análisis para evaluar cómo diferentes lugares pueden adaptarse a las necesidades de una población que envejece cada vez más. Además, se espera contribuir a políticas públicas que puedan mejorar la actividad espacial de las personas mayores y así también su autonomía y bienestar.